Durante años la Fundación anunciaba a bombo y platillo, los logros conseguidos y su contribución con la sociedad, a través del Programa, así como el número de familias que se habían beneficiado de la iniciativa. 

​

Toda una declaración de buenas intenciones que han caido en saco roto cuando la economía del ladrillo se volvió a reactivar. Desde hace un par de años, centenas de familias son echadas, literlamente a la calle, por no cumplir los requisitos, ahora, de acceso. El programa de "Alquiler solidario" destinado a las familias más vulnerables, ha desaparecido en su práctica totalidad. Ahora es el turno del Programa de Alquiler Asequible que ya ha sustituito su nombre y su vinculación con la Fundación por "Inmocaixa - Alquiler Básico" 

​

Como muchas familias, hemos sido totalmente engañadas. Tras siete años residiendo en nuestras viviendas, nos llega la hora de finalización del contrato y recibimos las cartas en las que se nos oferta la compra de las viviendas en un precio superior al precio de mercado, (aunque muchos vecinos aún siguen sin recibirla) y/o la posibilidad de nuevo contrato de arrendamiento con un incremento que hasta los cerca de los 1000 euros mensuales. ¿Dónde está el compromiso de alquiler asequible? ¿Dónde está el compromiso de compraventa a un precio asequible?